Fin de la Guerra de la Triple Alianza
Brasil y Argentina mantenían conflictos limítrofes con Paraguay, por tanto, la solución que encontraron fue imponer a ese estado determinados límites políticos a través de la guerra.
El gobierno uruguayo participó de la misma por compromisos diplomáticos contraídos por el entonces presidente de la República, Venancio Flores. El mismo se había levantado en armas contra el gobierno de Bernardo Berro, en abril de 1863, con la ayuda de Brasil y Argentina. A cambio de ese apoyo, Flores se comprometió a participar en la guerra contra Paraguay.