Nace Jean-Paul Sartre
En un momento en que masivamente se identifica la libertad con la ampliación de poseer lo que se desea, donde el valor está puesto en el precio de lo que se consume, donde el bien común es un problema ajeno, donde el número de pertenencias marca el límite de las responsabilidades, donde “la mayor ganancia” se ha convertido en el único sinónimo de “éxito”.